Buenas prácticas

El objetivo del Manual es sistematizar criterios, pautas y normas que sirvan para abordar todas las fases del proceso de recuperación de una barriada residencial: evaluación de su nivel de obsolescencia, proyecto urbanístico-arquitectónico, ejecución del mismo, gestión del proceso y posterior seguimiento. Son objeto de especial atención: el análisis (urbano, arquitectónico, energético, medioambiental, social, patrimonial, económico, funcional, etc.), el diagnóstico, la determinación de acciones y líneas de actuación, las propuestas de intervención arquitectónica y social, así como la gestión. Todo ello desde un espíritu orientado al fomento de la participación ciudadana y el compromiso con los agentes involucrados.

El Manual va dirigido a:

  1. Las administraciones públicas.
  2. Los profesionales y promotores privados involucrados en estos procesos.
  3. Las entidades y comunidades desde las que se gestiona la participación ciudadana en los mismos.
  4. Las universidades y centros de investigación donde se aborden estas cuestiones.

La rehabilitación de una barriada residencial obsoleta debe llevarse a cabo tanto en el ámbito privado como en el público y comunitario. En este apartado, se recogen aquellas buenas prácticas dirigidas a la mejora del conjunto urbano de la barriada con el objetivo último de mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Este modelo apuesta por la transformación y recualificación del espacio libre a partir del tejido urbano existente.

Las barriadas de estudio fueron construidas siguiendo las recomendaciones de la Carta de Atenas, respondiendo a las necesidades de urgencia del momento. Se construyeron en la época del desarrollismo en España, a finales de la dictadura franquista, respondiendo a una gran demanda de viviendas. La rápida ejecución de los proyectos no priorizó la construcción de equipamientos y espacios públicos cualificados, empobreciendo la vida comunitaria de estos complejos residenciales. En décadas posteriores, la carencia de nuevos usos y servicios se han ido subsanando mediante construcciones en el entorno de algunas de estas barriadas. No obstante, la mayoría de ellas siguen presentando una acuciante necesidad de mejora en la cualificación de sus entornos urbanos.

A partir de los problemas identificados, esta sección del manual se divide en siete bloques de buenas prácticas: barriadas compactas, conectadas, verdes, multifuncionales, creativas, seguras e inclusivas. Barriadas compactas incluirá buenas prácticas que afectan a su morfología urbana, barriadas conectadas combatirá problemas de aislamiento urbano, barriadas verdes trabajará en acercar la naturaleza a estas zonas urbanas, barriadas multifuncionales tendrá como objetivo atraer una gran diversidad de actividades, barriadas creativas tratará de construir un entorno urbano que fomente la creatividad y la expresión cultural entre sus habitantes, barriadas seguras combatirá los problemas de inseguridad derivadas del diseño y barriadas inclusivas atenderá a problemas de exclusión social que sufren muchas de estas zonas urbanas.

Galtzaraborda, Errenteria, Vaumm Arkitekturak. Fotografía: Aitor Ortiz

En esta sección:

  1. Buenas prácticas urbanas
  2. Buenas prácticas arquitectónicas
  3. Buenas prácticas ambientales y energéticas
  4. Buenas prácticas de gestión
  5. Anexo 1: Casos ejemplares europeos
  6. Anexo 2: Consideraciones patrimoniales
  7. Anexo 3: Consideraciones sobre los sistemas constructivos y estructurales y estado de conservación