Barriadas inclusivas

Las barriadas de viviendas sociales fueron concebidas para acomodar a la clase trabajadora y resolver los problemas de demanda de vivienda. Después de varias décadas, la composición social de estos barrios ha cambiado, por lo que las barriadas no responden a las necesidades de la población. Los cambios en la composición social de la barriada varían según el caso, pero es común encontrarse con una población envejecida o con la llegada de inmigrantes, que proporcionan una mayor diversidad cultural. Uno de los principales síntomas de obsolescencia de estos barrios reside en el hecho de no responder a las necesidades de todos los colectivos.

Las estrategias de intervención irán dirigidas a atender a las nuevas necesidades poblacionales y a tener capacidad de adaptarse a futuros cambios en la composición socioeconómica y cultural del barrio. Esto supone construir un espacio público poco prescriptivo, que deje lugar a la improvisación y a su libre utilización por parte de los habitantes. El diseño del espacio urbano debe responder a cuestiones de edad (niños, adolescentes, mayores), género y cultura. En cuestiones de edad, se generarán espacios que inviten al juego y que fomenten la educación para niños. También se prestará atención a la provisión de espacios de entretenimiento y que fomenten la creatividad entre los adolescentes. Del mismo modo, se dispondrán equipamientos que favorezcan la socialización y el desarrollo vital de los mayores. Estas infraestructuras urbanas para diferentes grupos de edad se dispondrán de forma isótropa en el espacio público, sin provocar segregación. El diseño del espacio público también atenderá a la cuestión de género, creando espacios seguros e integradores, concentrando una gran diversidad de actividades. Las intervenciones también fomentarán la inclusión de las diferentes culturas en la vida social de barrio mediante la provisión de espacios que promuevan la expresión cultural.

Desafíos

• Adaptar el espacio público a las necesidades de todos los colectivos.
• Romper la homogeneidad en las barriadas, atendiendo a las singularidades sociales y culturales.
• Fomentar la inclusión social.